¿Qué es el Holter?

 

El MONITOREO HOLTER es un estudio que consiste en la grabación de la actividad eléctrica del corazón dentro de un periodo de 24 o 48 horas en forma ambulatoria (en reposo y en actividad), mientras el paciente lleva su vida en forma prácticamente normal.

 

Recibe este nombre en honor de su inventor, Norman Holter, físico norteamericano que desarrolló el primer dispositivo portátil para realizar este tipo de montoreo en la década de los 40s durante el siglo pasado.

 

Es curioso recordar que el aparato original inventado por Holter pesaba 36kg y el paciente tenía que cargarlo en su espalda, lo cual seguramente le resultaría algo incómodo, ¿no le parece?

 

Afortunadamente, sus trabajos y los de científicos posteriores a él, continuaron sobre la ruta de su mejoramiento para disminuir sus dimensiones y ampliar su utilidad.

 

El tamaño de la grabadora pudo hacerse cada vez menor a través del tiempo, y llegar en la actualidad, a dispositivos de escasos centímetros que pueden llevarse en una pequeña bolsa sostenida del cinturón, colgados del cuello o incluso algunos que pueden ser implantados debajo de la piel.

 

La ventaja central que tiene este sistema frente al electrocardiograma (ECG) de reposo convencional, es que permite mantener una vigilancia por un tiempo mucho mayor, lo cual incrementa notablemente la probabilidad de documentar trastornos del ritmo (arritmias) o de la conducción (bloqueos), así como alteraciones en la morfología o el voltaje de las ondas eléctricas generadas en el corazón.

 

En sus inicios esta técnica se utilizaba sólo en el diagnóstico y en la caracterización de las arritmias cardíacas. Sus principales indicaciones eran correlacionar de forma objetiva los síntomas y las arritmias, conocer la gravedad, los mecanismos y las circunstancias que las determinaban y evaluar la eficacia del tratamiento con fármacos antiarrítmicos.

Sin embargo, los avances tecnológicos de los equipos permitieron posteriormente obtener un registro adecuado y fiable del segmento ST, lo cual ha convertido la evaluación de la isquemia miocárdica, en particular la que no se acompaña de síntomas (isquemia silente), en otra importante aplicación de este estudio.

 

Entre las principales indicaciones para la realización de un monitoreo Holter destacan:

 

-Valoración de arritmias que puedan ser causantes de signos y/o síntomas manifestados por el paciente, tales como palpitaciones, dolor torácico, falta de aire (disnea), mareo, presíncope o síncope (desmayo),

 

-Valoración de isquemia miocárdica, es decir, para la evaluación de alteraciones electrocardiográficas originadas por un desbalance entre aporte y demanda de oxígeno en relación con el músculo cardiaco).

 

En este sentido, para fines diagnósticos deberán ser consideradas como isquémicas sólo aquellas depresiones del segmento ST de por lo menos 1mm y de 2 minutos de duración.

 

-Valoración de la eficacia del tratamiento con medicamentos antiarrítmicos (Propafenona, Amiodarona, etc).

 

-Valoración de la función de marcapasos.

 

Estas son sólo algunas de las utilidades que proporciona el monitoreo Holter, tanto en el diagnóstico como en el seguimiento de las enfermedades cardiacas (con alteraciones estructurales o no) que cursan con alteraciones electrocardiográficas y que en muchas ocasiones requerirán tratamiento específico con fármacos antiarrítmicos y en algunas, de dispositivos de estimulación eléctrica (marcapasos, desfibriladores, etc.).

​